Aprender a esperar, esperar y esperar
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Analógico. Recuerdo ese miedo profundo al fracaso por la falta de experiencia. Fantaseaba con el fotón del día y/o con la excusa perfecta por si el negativo me delataba. Aprendí a no hacer ruido, a pedir, a callar, a mirar, a no gastar, a enfrentarme al mundo y a mí misma, a no tener hambre, a pasar frio y calor, a no llorar, a esperar…
Luego llegó el digital. Aprendí a disparar un segundo antes, a corregir, a reinventar, a manejar programas informáticos, a trabajar el doble, a cobrar la mitad, a sacar las mismas fotos que ‘cualquiera’, a fusilar, a no discutir, a esperar…
Ahora llega el video… a esperar.
Danza contemporánea, Ibiza 1999.
Tu entrada rezuma cansancio. Parece que la fotografía profesional parece ser un mundo de ascesis, espera, sacrificio y dedicación. Una eterna cuesta arriba, por lo visto.
¿Y las compensaciones, aparte de la de conseguir llegar a fin de mes?.
Lo pregunta uno que ni siquiera es un «cualquiera».
Odiseo: hablo de la fotografía de prensa. No parece, es. Puro realismo. Cualquiera somos todos, según como se mire… El video puede ser una esperanza, segun como se mire. A esperar. 🙂
Qué gran verdad amiga!. Esperar enferma, te lo digo por experiencia y con total literalidad. Llevo trece días sin levantar cabeza y todo por culpa de una cuentra atrás que nunca se acaba… y mientras tanto no cabe otra… seguir esperando es la única vía… ahora solo quiero que la salud vuelva, para poder esperar sin tener que luchar por respirar.
y yo que me muero por poder vivir de esto…
para mi lo bonito es seguir siempre aprendiendo, o al menos de momento…
ah, preciosa imagen.
Nuria: Siento lo de tu letargo a medio gas. A veces sucede que cuando no hacemos caso a las peticiones de nuestro cuerpo, el cuerpo actua con autonomía propia. Sin permiso. Gracias por compartir 🙂 ¡cuídate wapa!
Gon: Después de 10 años sigo muriéndome por esto, es un trabajo alucinante. Lo malo es el cansancio, porque para poder vivir hay que trabajar muuuuuuuuucho, siempre. Y siempre mejor, y siempre aprendiendo, porque los avances tecnológicos no dan tregua… Aún así YO SIGO, al menos por el momento… Gracias y ¡SUERTE!
Parar? ni de conya; que pare s’abuela!!! No… seguir, pillar-li la ma a les adversitats i anar davant dels nubols, com diguem per ací; aprendrer i seguir creguent que les coses es poden fer a cada dia, un poc millor, plantar-se front a qui siga i demostrar que es així; i no hi ha altra forma de tirar endavant (i tindrer sort, però això sempre s’espera)Doncs, el que tu fas, no?
Manuel: 😉 ¿Salat? :-*
No entenc la pregunta. Jo no he dit res de «salat» je,je… a vorer si no tinc desconectat el traductor al japonés que gaste per a la meua amiga Kobayahi!!! xe, xe, xe… i quin bolet!!!
No entenc la pregunta. Jo no he dit res de «salat» je,je… a vorer si no tinc desconectat el traductor al japonés que gaste per a la meua amiga Kobayahi!!! xe, xe, xe… i quin bolet!!!
Hombre si hay que esperar se espera… pero si nos ponen unas cervezas y unos pistachos mejor!
Y si hay que seguir esperando… que nos pongan unos gintonics y arreglao!
Besos de Gustavo, el Reggi
Ei Marga, ¡¡¡me encanta la foto!!!
Los cambios en fotografía van a una velocidad de vértigo, pero en el fondo, siempre tiene que haber detrás de la cámara un ojo que mire, y «algo» que medio piense, je,je. La verdad es que parece que llevemos en las manos un ordenador en vez de una cámara de fotos…y de lo del video no hablemos, me da una grima!
saludos!
Manuel: El traductor habrá cogido un virus y se ha reconvertido al ibicenco… es por el artículo salado.. ¿s’abuela? petons 🙂
Anónimo Reggi: ¿y para la tercera espera? ya borrachos… creo que para conseguir el buen resultado del 3er objetivo no es prudente echarse a esperar durmiendo la mona.. ¡besote guapete! 🙂
Tallón: Dos ojos que miren y dos o tres «tus» para que piensen… lo del vídeo no apetece pero está ¡ya! así que ¡¡a currar!! 😉 :-*
Aaaahhhhhhhh!!!
pa la tercera ya está el oviedo.
Reggi, el Gustavo
La espera y el aburrimiento van ligados; y el aburrimiento es el cáncer del siglo XXI